La probabilidad de sufrir lesiones si no se tienen en cuenta las recomendaciones oportunas es más alta de lo que nos gustaría reconocer, pero con un adecuado plan de entrenamiento y con prestar atención a pequeñas, aunque importantes, pautas, todo saldrá a la perfección.
Hay recomendaciones específicas para deportes como el senderismo, pero podemos establecer algunos consejos generales para todos.
1. Acudir a un especialista
Si no tienes experiencia previa en la práctica de un deporte, es lo primero que has de hacer. El instructor te aconsejará sobre las técnicas, qué hacer en tu nivel, cómo se utiliza el material, cuáles son las normas de seguridad, te dará los cursos correspondientes...
2. Contar con una buena preparación física
No se trata de ser un deportista de élite, pero sí de tener más o menos algo de fondo físico, resistencia y fuerza. Si tenemos los músculos fuertes es menos probable que nos lesionemos.
3. Prestar especial atención al equipo
Si eres aficionado a un deporte para el que necesites utilizar material, sé bueno en su cuidado y hazle las revisiones oportunas para asegurarte de que está en buen estado. No sirve de nada tener una cuerda de escalada que se vaya a romper en cualquier momento o un invento que te una a la tabla de surf que no cierre bien.
4. Calentar siempre antes de hacer la actividad
Parece algo sin importancia a simple vista, pero no lo es. Cerciórate de que calientes bien todo el cuerpo, centrándote en aquellas partes que más trabajarán durante la práctica de tu hobby.
5. Haz los descansos que consideres oportunos
Si crees que ya no puedes continuar es mejor que pares unos minutos, ya que la mayor parte de las lesiones se producen por sobrecarga muscular. Descansa con cuidado de no quedarte frío y vuelve a la carga.
6. Tómatelo con calma
Si no eres un habitual del ejercicio físico y sales unos días a practicarlo, como en vacaciones de surf o de esquí, procura no forzarte mucho el primer día. Ten en cuenta que es muy importante que descanses las horas suficientes y que el intentar aprovechar al máximo tu paso por ahí puede jugarte una mala pasada. Es mejor hacer todos los días un poco a por ejemplo querer progresar los 2 primeros días y acabar tan cansado que los otros 3 no tengas fuerzas para continuar. Además habrá lesiones seguramente.
7. Conoce tus límites
Sé consciente de hasta dónde eres capaz de llegar. Es bueno explorar nuestras capacidades y ver dónde llegamos, pero esto nos puede traer consecuencias graves.
8. No te olvides de estirar bien tras la actividad
A veces acabas tan cansado que lo que más te apetece es ir a darte una buena ducha y reponer fuerzas. Pero es muy conveniente que aunque sea le dediques 5 minutos a estirar todos los músculos. Evitarás que se carguen y tendrás menos agujetas al día siguiente.
9. Escucha a tu cuerpo
Lo más importante de todo es que escuches lo que tu cuerpo te diga. Tu cuerpo eres tú y tú eres tu cuerpo, por eso es fundamental prestar atención a las necesidades que requiera.
Con todo esto te alejarás de las temidas lesiones.