Espeleología en la cueva de Tibigracias La Vecilla

Si eres de los que disfruta de una buena ruta de barranquismo nosotros te queremos presentar a su antítesis, la espeleología. Este deporte de aventura olvidado por muchos es una auténtica delicia y promete lo mismo que el descenso de barrancos solo que de una forma más emocionante, bajo tierra. Por eso nosotros tenemos un planazo trazado y solo nos faltas tú, una ruta de espeleología por la cueva de Tibigracias, en la localidad leonesa de La Vecilla.

Esta región es un auténtico edén para una ruta de espeleología por la infinidad de cuevas que tiene, pero esta sin duda es realmente especial y singular. Pero antes de entrar a lo que a todos nos interesa, primero queremos decirte que no te hará falta nada. Solo tendrás que venir con ropa deportiva, botas de agua, toalla y una muda para cambiarte. Olvídate de cualquier otra cosa porque de todos los materiales y del guía profesional nos encargamos nosotros.

A una ruta de espeleología no se puede apuntar cualquiera, aunque la cueva de Tibigracias sin duda es una excepción, pues hasta los niños de 10 años como mínimo podrán acompañarte, lo único necesario es una forma física relativamente buena. Esta cueva se encuentra en las Hoces de Valdeteja y para conocerla emprenderemos un recorrido de 1 kilómetro con 40 metros de desnivel.

La cueva de Tibigracias tiene una belleza espectacular y lo comprobaremos desde el inicio, tras pasar por su boca principal de 5 metros de ancho por 2 de alto. Superar su entrada nos desembocará en una rampa que nos llevará hasta dos pequeñas aperturas muy estrechas que atravesaremos reptando. Cuando pasemos esta parte y ya sobre nuestros pies, quedaremos anonadados al ver que estaremos frente a un sinuoso meandro subterráneo.

Estaremos entonces en el curso de un enorme río que se pasea por toda la cueva de Tibigracias y esto es lo que sin duda representa el gran atractivo de esta ruta de espeleología. Pensar que incluso en las entrañas de la tierra la naturaleza se abre paso a toda costa dejando ante nosotros un precioso paisaje natural y ecosistema propio, nos dejará sin palabras. Veremos como esta parte está seccionada en dos.

• El primer tramo de la ruta de espeleología por Tibigracias tiene apenas unos 200 metros y se desarrolla en sentido noroeste/sureste. Durante este trecho nadaremos y vadearemos por su río subterráneo, el cual estará enclaustrado entre unas paredes enormes.

• Ya la segunda parte comienza tras dejar atrás una cadena de galerías que forman un piso superior ligeramente más ancho. Siguiendo nuestro camino la curiosidad invadirá a nuestro cuerpo al toparnos con unas galerías fósiles espectaculares. En esta parte veremos espeleotemas, pozas inundadas de aguas y pequeñas grietas por las que pasar.

Acabada esta parte llegamos a una sala que es un auténtico caos por la inmensa cantidad de rocas y derrumbes de arcillas que tiene. En esta zona el contraste es intenso ya que, de estar arrastrándonos por el suelo y nadando por ríos subterráneos, pasaremos a encontrarnos en galerías de 400 metros cuadrados con techos de más de 20 metros altura. A partir de aquí ya lo que nos queda es continuar por un corto camino hasta llegar al final de la cueva de Tibigracias.

Prueba una ruta de espeleología con nosotros y descubre las curiosidades que atesoran las entrañas de las montañas leonesas que tienen lugar por el valle del Curueño.